domingo, 4 de octubre de 2009

la teta de un dios

En el ombligo del mundo alguien escucha muy atentamente unas voces a través de la pared. Estas voces murmuran sentimientos. Nuestro sujeto no podría expresarlos en palabras, pero podría hacer el intento de demostrar esos sentimientos de otras maneras. Es que las voces no hablan un idioma... gimen.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Las voces ni siquiera parecen estar ahi pero a veces las respiramos y nos ahogan mientras dormimos..,..

un abrazo matiuuu
hace rato q no pasaba por estos lares estan muy bonitos :)
suertecita
v.w